Dale un cambio a tu dormitorio y empieza por el cabecero

Si tienes un cabecero pero quizás después de muchos años conviviendo con él estas un poco aburrida, un cambio en su acabado y en su tela si es tapizado, puede darle un aire nuevo, fresco y distinto a tu dormitorio.

Hoy voy a poneros como ejemplo un cabecero que con un tapizado capitoné con tela en lino negro ha conseguido un nuevo look gracias al cambio de su pintura, de su tapizado y de su tela.

En este caso no se trata  de un cabecero antiguo, aunque perfectamente podría haberlo sido.

Uno de los clientes de nuestra tienda, que por cierto si no la conoces se llama Vilmupa, nos encargo hace un par de meses los muebles para el dormitorio. En aquel momento le gusto un cabecero con la estructura de madera envejecida con un tapizado liso en lino que vio en nuestra tienda online.

Este cabecero se encontraba en nuestra tienda en ese momento, pero como en alguna ocasión por desgracia ocurre, este cabecero se había agotado y fue descatalogado.

Intentamos buscar soluciones, o mejor dicho alternativas al cabecero en cuestión, pero el cliente tenía muy claro lo que quería para su dormitorio y su decoración pasaba por un cabecero como el que inicialmente había elegido

Después de darle muchas vueltas, hubo un modelo que por estilo, aunque no por el color de su pintura y tapizado podía encajar con lo que a nuestro cliente le había gustado

Estaba tapizado en lino negro capitoné, y la estructura de madera era de madera de roble natural, y en esos dos aspectos estaba lo que a nuestro cliente no le encajaba.

La forma sinuosa y redondeada de la madera le gustaba, pero el color claro de la madera natural no era la idea y lo mismo ocurría con el capitoné negro.

Manteniendo esa estructura, lo que se pretendía era que la madera tuviese un acabado grisáceo envejecido y el tapizado fuera mucho más claro y natural, y para ello, el lino valga la redundancia natural era perfecto.

También se quería eliminar el capitoné de su tapizado para darle ligereza al cabecero y con estas premisas nos pusimos manos a la obra

Lo primero fue cambiar el color de su madera y para ello tuvimos que ligarlo primero para posteriormente y después de muchas pruebas, empezar a pintar su marco de madera. Ahí estaba lo complicado, ya que en este tipo de acabados no hay un color con un ral con el que simplemente pintando lo podemos tener solucionado.

Una vez pintado, el paso siguiente era cambiar su tapizado, y con el característico lino natural francés le dimos un aire mucho más ligero y fresco.

Como una imagen vale más que mil palabras, os dejo alguna fotografía para que podáis apreciar el cambio del antes y el después, y la gran diferencia de estilo y estética que la pintura y la tela son capaces de hacer en un mismo cabecero.