Quizás es hilar fino, pero no son ni uno ni dos los clientes que vienen a nuestra tienda con la preocupación de que el rodapié que tienen en la pared, no les permite pegar el cabecero totalmente a la pared.
Normalmente la mayoría de los dormitorios cuentan en la parte inferior de la pared y en el encuentro con el suelo, un elemento que pudiendo ser de madera, de metal o de cerámica sirve como elemento decorativo y ayuda a dejar perfectamente rematado el encuentro del suelo con la pared. Y es que este encuentro no suele ser perfecto, ya que por la dilatación y sobre todo en suelos de madera, parquet o suelos laminados, obliga a los instaladores a separarse unos milímetros de la pared, de forma que si esto no quedase tapado, la sensación a la vista no sería buena, más bien todo lo contrario.
Se conoce sobre todo con el nombre de rodapié y lo habitual es que tenga una altura de entre 5 a 12 cm.
Desempeñando la misma función, nos encontramos también con las molduras, que suelen tener un diseño más elaborado, frente al tradicional rodapié que suele ser recto. Por último, los zócalos suelen ser mucho más altos, quedando a media altura de la pared, y cuya función en este caso además de disimular y rematar ese encuentro del suelo con la pared suele utilizarse para proteger la pared a la altura de las manos.
Pues bien, sobre todo en habitaciones muy pequeñas esos pocos centímetros pueden y llegan a preocupar a aquellos que están planteándose comprar un cabecero para ese dormitorio.
¿Qué puedo hacer para que el cabecero quede pegado a la pared?
Si tienes rodapié o moldura, solo tienes 3 posibilidades.
1.- Cortar y quitar el rodapié o zócalo en la zona donde la pata del cabecero debe tocar la pared. Esto de fácil y sencillo no tiene nada, ya que si quitarlo puede ser más o menos complicado, el remate estético de cómo quedará una vez quitado presenta mil dudas.
2.-Comprar un cabecero en el que se pueda rebajar esos centímetros que necesitaríamos quitar, para que al poner el cabecero en nuestra pared el rodapié no impidiera poderlo acercar totalmente
¿Y esto es posible? En Vilmupa en algunos de nuestros cabeceros, entre los que se encuentran los que acompañamos en estas fotografías esto son posibles
Son cabeceros de cama que en Vilmupa fabricamos a medida. Por este motivo en el proceso de fabricación, en nuestra carpintería podremos reducir o mejor dicho rebajar la madera en la parte trasera de la pata para salvar la altura de nuestro rodapié y así poder dejar colocado nuestro cabecero totalmente pegado a la pared
Somos fabricantes y esto nos permite no solo poder hacer una variación en tu cabecero como esta, sino otras más demandadas y no menos importantes como poder modificar el largo y el alto de nuestro cabecero para que este quede simplemente perfecto.
3.- Una última opción y sin duda es la que menos me convence y en ningún saso recomendaría es la de colgar el cabecero en la pared como si fuera un cuadro, de forma que las patas que deberían tocar el suelo quedarían suspendidas en el aire, eso sí salvando el rodapié.
Pero llegados a este punto sin duda pienso que es mejor perder esos centímetros que el rodapié nos obliga que optar por esta última solución.
